Cuando algo no es lo que esperabas y luego te sorprende.

Yo iba con la idea de ver cómo se tocaba uno de los descomunales órganos de St Paul, y cuando he entrado había un organito portátil tres veces más pequeño que el del conservatorio. “Vaya”, he pensado; pero me tengo que callar la boca. Cómo sonaba el bicho, parece mentira que desprendiera esos estruendos que hacían temblar toda la catedral. Me sentía grande. Me he sentado cerca del organista y he pillado toda la movida de los registros y los pedales… Uf uf que me agobio na más de verlo.
Era interesante que teníamos los panfletos con la explicación/comparación de los versículos con los números de la obra, y un par de curas iban narrando después de cada uno, pero no voy a meterme en religiosidades porque no las entiendo.
Y al final del panfletito ponía que no se podía aplaudir. Pero por qué? Qué pasa con que sea un sitio sagrado? La mejor recompensa del músico es el aplauso! Y para mí, después de que el concierto fuera gratis, era la única manera que tenía para agradecerlo.

Tchaikovsky, Hamlet Overture
Korngold, violin concerto
Prokofiev, Symphony No 5

Una pena, pobre Tai. La única razón que se me ocurre para que tocara con ellos es que estuviera de profe en el encuentro.

Yo esperaba una especie de Jonde pero qué va, ni punto de comparación. Eran niños de unos quince años que defendían como podían el papelón que les había caído encima. El Tchaikovsky fue tristemente insoportable y en el concierto… Lo pasé mal por ella. No había forma de que la siguieran, aparte de que la tapaban cual oso de la montaña. Eran ciento y la madre! Tres tubas… 10 trompas, 7 fagotes, qué coño? A ver si alguno la daba, no? Pues no, ni uno. 
Ella es brillante pero no pudo compartirlo nada más que en los solos. Ya la había escuchado antes, incluso me he comido un bacalao dorao con ella, y me puse muy triste porque es una gran violinista. Deberían programarla con la orquesta grande. En fin.
El concierto como tal molaba. Contemporáneo pero tampoco mucho, un poco fantaseoso, como el público (ciento y la madre multiplicado por padres, abuelos y primosterceros afantasmados). 
Nos fuimos en el descanso.

Canciones francesas y españolas del siglo XX

 Jajajajaja esta tía es la jefa de todos. Qué cachonda. Hizo un recital cómico-absurdo que ojo, perfectamente encajaba con el contexto surrealista, dadaísta e impresionista del programa. De repente  se disfrazaba o se ponía a guisar dentro del piano pero claro, (para los puritanos) es Satie y estaba dando las instrucciones sobre la cocina francesa! 
Su interpretación me recordaba mucho a los ballets, Milhaud, Satie, Poulenc… y lo descabellado de sus escenas… Imagina a la pianista tocando con una trompa de elefante en la nariz o a Patricia cantando con unas gafas de Bartolo. Esque me meaba de la risa pero era buenísimo! La perfección técnica era incluso más perfecta y el dúo no podía tener más sincronización. 
También hubo parte seria claro, las canciones españolas las tranquilizó un poco aunque te digo una cosa, estaba esperando que saliera con el vestido de lunares. Pero también es verdad que… sonaba un poco a flamenco operizao. Lo hacía muy bien pero ains, será que escuchaba a muchos gitanos cantando debajo de mi ventana cuando llegaba el buen tiempo a Badajoz.

Por lo menos una vez en la vida hay que verlo en directo. Quizá no más, porque a partir de la segunda hora empieza a dolerte el culo, pero merece la pena. 

El coro impone, yo creo que aunque no cantaran, verlos a todos ahí me haría pensar que va a pasar algo grande. Y lo fue, fue muy grande. Entiendo que sea una de las obras maestras pero digo entiendo porque supe entender. ¿Cuántas veces hemos dicho “yo esque la música barroca un rato bien pero más ya…”. Invito ahora a preguntarnos… ¿Entendemos más de un rato? Quizá ese sea nuestro problema, que no sabemos escuchar lo que no estamos acostumbrados a escuchar. No puedo evitar nombar las clases de música antigua y clave del conservatorio, sin las que probablemente este Mesías me hubiera parecido un poco mentiroso.
Cuatro solistas brillantes de los cuales uno era contra tenor. Uy que impresión, qué raro; cerrabas los ojos y escuchabas una mujer, los abrías y veías un hombre. Castrati?
Algo que me sorprendió fue que cuando llegó el Aleluya la gente se puso de pie. ¿Religión? ¿Entonces por qué no escuchamos el Ave María de las bodas de pie? ¿Respeto? Pues me pondré de pie en la 9ª de Beethoven también. ¿Postureo inglés?